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VERDAD, BELLEZA, JUSTICIA: las tres columnas del peronismo
En la esencia del peronismo late el alma de un pueblo humanista y cristiano, que supo levantarse desde las cenizas del olvido.
13/12/2024
Por Luis Gotte
En la esencia del peronismo late el alma de un pueblo humanista y cristiano, que supo levantarse desde las cenizas del olvido. Un pueblo que lloró la injusticia, pero jamás se resignó al dolor. Este movimiento no nació en los libros ni en las academias de Europa; brotó del sudor, la sangre y la esperanza de los humildes. Hoy, más que nunca, es necesario recordar las tres banderas que el Gral. Juan D. Perón izó como guía y horizonte: soberanía política, independencia económica y justicia social, pilares que podemos sintetizar en tres ideales eternos: Verdad, Belleza y Justicia.
La Verdad como Principio
La Verdad no es la mera ausencia de mentira; es la luz que disipa las sombras del sometimiento y la ignorancia. En un tiempo de posverdad y manipulación, el peronismo se alza como un faro que resiste las tempestades de la tergiversación. Decir la Verdad peronista es afirmar que no somos ni liberales ni socialdemócratas: somos argentinos con un sueño colectivo. Es proclamar que el pan debe estar en todas las mesas y que la riqueza de nuestra tierra pertenece a todos. La Verdad del peronismo no se construye en soledad ni en despachos cerrados: se forja en comunidad, enfrentando al poder con el coraje de quien lucha por lo justo.
La Belleza como Ideal
La Belleza no es solo lo que agrada a los ojos; es el orden justo, armónico y solidario que ennoblece la vida. Es la risa de un niño que aprende, el orgullo del obrero que regresa a casa con dignidad, el abuelo que camina al sol de cada mañana con la paz de la justicia conquistada. Es la cultura que florece en las chacareras y zambas, en los murales de los barrios y en la memoria criolla y mestiza de la patria. La Belleza peronista no imita ni se disfraza de extranjero; es el alma argentina que camina con la frente alta, enraizada en su historia y orgullosa de su identidad.
La Justicia como Destino
La Justicia no es simplemente una norma escrita; es el anhelo profundo de un pueblo que sueña con una comunidad sin explotados ni explotadores.